Por Carolina Erices, Economista y docente del departamento de Ingeniería Comercial USM
La economía digital ha emergido como un catalizador esencial para el desarrollo de las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), caracterizándose por una intensiva incorporación de tecnologías digitales, tales como aplicaciones informáticas, herramientas en línea y plataformas digitales. Dentro del contexto de las Pymes, este fenómeno despliega oportunidades de considerable envergadura:
- Globalización de Mercados: La economía digital capacita a las Pymes para expandir sus fronteras a escala internacional, accediendo a nuevos mercados y estableciendo conexiones con clientes mediante plataformas en línea especializadas.
- Eficiencia Operativa: La integración de soluciones digitales en la gestión interna de las Pymes conlleva a una optimización significativa de los procesos operativos, generando mejoras sustanciales en la eficiencia empresarial y la reducción de costos.
- Adaptabilidad a Cambios: La rápida adopción de tecnologías digitales proporciona a las Pymes la flexibilidad necesaria para ajustarse ágilmente a los cambios dinámicos en el entorno empresarial, potenciando su capacidad de respuesta ante desafíos emergentes.
- Interconexión Empresarial: La economía digital actúa como facilitador en la creación de redes empresariales, promoviendo alianzas estratégicas entre Pymes y otras entidades, generando sinergias que propulsan el desarrollo conjunto y la innovación compartida.
En síntesis, la economía digital no solo se erige como proveedora de herramientas propicias para el crecimiento y la eficiencia, sino que también fortalece la resiliencia y la colaboración entre las Pymes, consolidándolas en un entorno empresarial cada vez más impregnado de digitalización.