Por Carolina Erices Garcia profesora del Departamento de Ingeniería Comercial Universidad Técnica Federico Santa María
En Chile, las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (pymes) constituyen más del 98% del tejido empresarial, lo cual las convierte en la columna vertebral de la economía local, nacional y global. La Economía Circular (EC) está ganando cada vez más seguidores a nivel mundial. Esta filosofía implica repensar los productos, procesos y modelos de negocio para eliminar el concepto de basura y mantener el valor de los materiales durante el mayor tiempo posible. Aunque la conversación sobre economía circular ha involucrado principalmente a organizaciones internacionales, gobiernos y grandes empresas, las pymes están mostrando un mayor interés y comprensión de los beneficios que esta puede traer a sus negocios.
La adopción de la economía circular por parte de las pymes puede generar ahorros en los costos de materiales, así como crear una ventaja competitiva y abrir nuevos mercados. En Europa, por ejemplo, se ha observado un aumento en el interés de las pymes por la economía circular en los últimos años. Según un estudio, aproximadamente el 73,2% de las pymes europeas encuestadas habían emprendido o estaban en proceso de emprender al menos una actividad relacionada con la economía circular en los últimos tres años
En Chile también se están desarrollando iniciativas relacionadas con la economía circular en el ámbito de las pymes. El Ministerio del Medio Ambiente ha promovido la economía circular como parte de su enfoque hacia un desarrollo sostenible para el año 2040. Han implementado programas y proyectos para fomentar la reducción, reutilización, reciclaje y compostaje, entre otras prácticas. Además, han otorgado fondos para el reciclaje en el año 2023, cuyos resultados de adjudicación están disponibles.
Otra iniciativa destacada es la convocatoria de los Circular Awards 2023, organizada por la Fundación Desafío Circular en colaboración con Enel. Estos premios buscan reconocer y premiar a los emprendimientos e innovaciones que lideran la economía circular en Chile. Las categorías clave para participar incluyen Desafío AGUA, Desafío EMISIONES, Desafío VALORIZACIÓN, Desafío ENERGÍA y Desafío SOCIAL. Un jurado de expertos evaluará las iniciativas en función de la integración de los principios de economía circular en productos y servicios, la implementación de políticas y estrategias de circularidad, y la contribución al desarrollo de un ecosistema sostenible mediante alianzas y colaboraciones.
Como sabemos, las pymes en Chile tienen un papel crucial en la economía circular. Su participación en esta transición puede generar beneficios económicos, como ahorros en costos de materiales, así como ventajas competitivas y la apertura de nuevos mercados. Es alentador ver cómo las pymes están mostrando un mayor interés y comprensión de la importancia de la economía circular en sus negocios. Con el apoyo adecuado, las pymes chilenas pueden contribuir significativamente a la construcción de una economía más sostenible y circular en el mediano plazo.
