Pocos son los emprendimientos que suelen perdurar en el tiempo y es que Chile, a pesar de ser uno de los paises de latinoamerica en donde sus habitantes deciden emprender, lamentablemente ocho de cada 10 emprendimientos suelen fracasar; Sin embargo, la pastelería Stefani, es un ejemplo a seguir.Sus productos han logrado mantenerse en los hogares de miles de porteños por más de 70 años y es que hasta a la Reina Isabell II deleitaron con sus ricos pasteles de merengue y frutilla en su visita a la Ciudad en el 1986.
-Stefani- surge del nombre de uno de sus fundadores, Stefan Bialoskorkis D, quien junto a su esposa Ella Weglinski e hijos, llegaron al país, después de terminada la segunda Guerra Mundial, en 1948. Una familia de alemanes que debieron iniciar desde cero, enfrentándose a nuevas culturas y lo más complicado, el idioma.
La familia Bialoskorski, tenía conocimiento en la pastelería, pues a eso se dedicaban en su tierra natal. Al llegar a Chile empezaron a fabricar ricos turrones desde su vivienda. No fue nada fácil , pues los señores Stefan Bialoskorkis y Ella Weglinski, se vieron obligados a reinventar sus recetas y fusionar sabores para agradar el paladar de los chilenos, “Mi familia tuvo que cambiar el menú. Antiguamente mis padres hacían un pastel relleno llamado en europa-Pan de Pascua Polaco-, donde se ocupa mucho con semilla de amapola. Mis padres se dieron cuenta que aquí no era muy conocida esa semilla y a lo mejor la gente podría no gustarle por eso, reemplazaron las semillas, por nueces” dijo a La Quinta Emprende Edward Bialoskorkis, hijo menor y actual encargado de la pastelería.
Peso a peso fueron reuniendo, pues la meta era volver a tener una pastelería. Fue entonces que en tres años de haber pisado suelo chileno inauguraron la pastelería en el sector independencia, para luego establecerse en la calle Condell 1608, Valparaíso.
¿Cuál ha sido el secreto para perdurar por tantos años?, “hacer las cosas bien, y hacer algo tan básico como, cuidar la materia prima, pero por sobretodo no caer ante cualquier situación que nos asuste. Pensar en satisfacer al cliente y ofrecerles productos diferentes. Nuestro mayor logro es que la gente nos retribuye, eso para nosotros es lo más importante” acotó el encargado de la pastelería.
Hoy gracias a su constancia durante más de siete décadas, son reconocidos por fabricar las mejores tortas de milhojas. Es verdad , el hojaldre de Stefani es francamente insuperable y, al menos hasta ahora, irrepetible. Ni hablar de sus alfajores y suaves galletas surtidas especiales para toda once o momento especial.
Si tiene la oportunidad vaya y visite este buen lugar. Le encantará