Probablemente te has dado cuenta que comprar alimentos y artículos básicos para el hogar es más caro por estos días y se espera, para este 2022, seguir pagando más por la comida.
Revisando las cifras de inflación, nuestro país tuvo su mayor registro en 14 años al cerrar el año 2021 con un 7,2%. Si bien, en Chile los factores que aceleraron su trayectoria fueron la mayor liquidez que presionó la demanda interna; también hubo otras variables externas que permitieron esta alza en los precios; como los problemas logísticos en el comercio internacional, frenos en la producción de bienes en el mundo debido a la pandemia, lo que produjo a nivel global que el precio de los alimentos alcanzara máximos no vistos en una década.
Sin lugar a duda, el alza de los precios es un fenómeno mundial y cuyo análisis se basa en la industria de los alimentos, donde los precios de insumos como el trigo, aceite y azúcar han presentado las mayores alzas.
El índice de los precios mundiales de los alimentos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) alcanzó un nuevo récord en febrero con un promedio de 140,7 puntos, es decir, un 3,9% más que en enero y un 24,1% más que en diciembre de 2021. El organismo destacó que, en el alza, pesó el precio de los aceites vegetales, el que alcanzo un promedio de 164,8 puntos, registrando un aumento de 65,4puntos (un 65,8 %) desde 2020 y representa el nivel más elevado de todos los tiempos, alcanzando así un nuevo récord, impulsado principalmente por el aumento de las cotizaciones de los aceites de palma, de soja y de girasol.
Pero en simple… ¿Cuáles son las razones para el alza de precios del aceite?
El presupuesto familiar destinado a la alimentación ya se ha visto ajustado, considerando el alza de precios de estos artículos durante el año 2020, el 2021 y en lo que va del 2022. Todo esto no solo en Chile, si no a nivel mundial.
Esta espiral de subida de precios sin duda está afectado al mundo entero y por supuesto, repercutirá en el precio final de los productos y en el bolsillo de los consumidores. Revisemos sus principales razones:
1.- Repercusiones del conflicto Rusia – Ucrania
La invasión de Ucrania por parte de Rusia conmocionó a los mercados de productos básicos y, junto con las sanciones internacionales impuestas a Rusia, están afectando a la industria alimenticia mundial, elevando los precios de sus productos.
El embargo del aceite de girasol, cuyos principales productores son precisamente, Rusia y Ucrania, también han revalorizado el precio del aceite de oliva, al producirse el efecto sustitución Por este motivo, muchos consumidores y hosteleros han optado por el aceite de oliva como alternativa, especialmente en sus categorías más suaves y baratas, elevándose así los precios. Esto se une, además, a la menor producción debido a la sequía y al mayor costo de insumos, como el combustible y fertilizantes.
Por otro lado, Rusia era un mercado emergente para el sector, por lo que este conflicto afectará negativamente a las exportaciones de aceite de oliva a ese país. En la actual situación, el precio del litro de oliva virgen alcanzó un récord el mes pasado, según las Naciones Unidas, justo cuando ya se desarrollaba la guerra en el granero del mundo.
2.- Pandemia de Covid-19
El alza de precios a nivel mundial, también se explica a consecuencias de la pandemia, que trajo una serie de factores que comenzaron a gestar un alza en los precios.
La pérdida de mano de obra por contagios, cierre de fronteras y dificultades en la movilización, se traduce en una menor productividad. Las empresas han tenido que asumir sobrecostos por la pandemia, como la compra de mascarillas, de trajes de bioseguridad y la contratación de transporte privado para proteger a su fuerza de trabajo de los contagios. La escasez de temporeros ha ocasionado que algunas cosechas no hayan podido atenderse como de costumbre y por desgracia, se han perdido en parte o incluso, en su totalidad.
Factores como las restricciones de la carga marítima y terrestre, el aumento de los costos de flete y seguro, ha tenido como consecuencia un incremento «significativo» en el precio de los alimentos.
3.- Petróleo
El incremento de costo del aceite también se debe a la recuperación de los precios del petróleo. Los precios del petróleo en los mercados internacionales se han recuperado por el aumento de la demanda, por la apertura de los mercados y la reactivación económica. La recuperación de los precios del petróleo no solo influye en el aceite, sino en casi todos los precios de los commodities o bienes primarios. ¿Por qué? Porque el petróleo se utiliza en los procesos productivos que necesitan generar energía y también como combustible para transporte.
4.- Medidas contra cíclicas
Para evitar una mayor contracción de las economías por la pandemia, los grandes países, incluido Chile, adoptaron medidas contra cíclicas, como paquetes de estímulos fiscales (bonos, ayudas, IFE, entre otros). Cuando se dicta ese tipo de políticas puede haber un efecto inflacionario, que en este caso, hace que el dólar se aprecie, o en otras palabras, que el precio de los productos importados que ingresen al mercado nacional sean “más caros”.
Ante esta situación ¿Qué podemos hacer las familias?
Clave es considerar estrategias para hacer frente a el alza de precios de algunos productos como el aceite, así como productos de primera necesidad. Nuestro país importa insumos y por ello se ha dado el incremento de los costos en la producción de los bienes finales, generando el alza de precios de los bienes y servicios que consumimos.
Frente a este análisis del mercado, te dejo algunas sugerencias que puede ser útil para hacer frente a este tipo de alzas:
- Sustituir aquellos productos que se han incrementado de precio por otros más baratos. Si consumía aceite producido con insumos importados, reemplácelos por los que utilizan insumos nacionales, sus precios se mantienen por debajo de los que venden estas empresas que controlan este producto.
- Buscar otras alternativas de alimentos que sean iguales o reemplacen a los que se consumen habitualmente y nutritivos. Si consumían carne de pollo, reemplazarlo por el consumo de pescado u otros tipos de carnes rojas o blancas con precios más asequibles.
- Si las familias tienen un excedente de dinero, lo mejor es ahorrar o buscar alternativas interesantes para multiplicarlo.
- No malgastar el dinero en productos que no generan ningún beneficio. Aprender a racionalizar su uso.
Muchas veces y en muchos lugares a lo largo de la historia se han producido incrementos importantes del precio de los alimentos. El constante aumento en la canasta básica es bastante preocupante porque afecta a las familias en forma directa. Ante este escenario, es fundamental fortalecer la producción nacional de alimentos, estudiando las consecuencias de los acuerdos económicos de Chile, ya que la mayor parte de nuestra cadena alimentaria depende casi en su totalidad del exterior.
Y tú qué opinas ¿está subiendo el precio del Aceite?