Especialistas en actividad física preescolar y escolar, funciones cognitivas y condición física, Johana Soto y Tomás Reyes, asesoran a los ministerios de Educación y del Deporte en el desarrollo de esta asignatura en cuarentena y cuando se abran los colegios.
Académicos e investigadores de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad de Playa Ancha (UPLA) fueron convocados a integrar la Mesa Técnica de Actividad Física y Educación Física en Pandemia MINEDUC-MINDEP.
Se trata del doctor Tomás Reyes Amigo, quien también es parte del Centro de Estudios Avanzados (CEA) de la UPLA, y cuya línea de investigación se enfoca en las clases de educación física en términos de intensidad, condición física y funciones cognitivas.
Junto a la doctora Johana Soto Sánchez, especialista en actividad física preescolar y escolar, así como en obesidad infantil, asesoran a las autoridades de los ministerios de Educación y del Deporte en cómo desarrollar la asignatura de educación física en tiempos de pandemia y cómo ejecutarla una vez que se abran los establecimientos educacionales.
“Ambos estamos asesorando una guía de actividades para las clases de educación física online y también tomando medidas para la vuelta a clases, específicamente, en la asignatura de educación física a través de un flujograma de indicaciones y cuestionario participativo, para que los estudiantes puedan regresar a clases de educación física de manera segura”, explicó el doctor Reyes.
El cierre de los establecimientos educacionales para evitar el avance del COVID-19 obligó a utilizar el escenario virtual para garantizar la continuidad del proceso formativo de los estudiantes, lo que no ha estado exento de dificultades.
En el ramo de educación física, puntualmente, el académico Tomás Reyes se refirió a las dificultades con las que han lidiado los docentes. “Una de las principales dificultades ha sido tener que acomodarse a esta nueva forma de hacer clases, sin que los colegios entreguen las condiciones para ello. Además, les han exigido de gran manera, dejando en segundo lugar la salud de los profesores. Es por eso que la mesa en la cual trabajamos tiene como propósito entregar alternativas para facilitar la planificación de clases de los docentes”.
Cuando abran los colegios
Sobre los aspectos que debieran contemplarse en la ejecución de clases de educación física cuando se retome la presencialidad, la investigadora Johana Soto Sánchez menciona algunos.
“Estamos realizando recomendaciones que consideren un regreso progresivo a la práctica de actividad física, analizando el estado de salud con el cual retornarán nuestros estudiantes, así como su estado nutricional. También consideramos hacer un análisis sobre qué pasos se seguirán en el caso de niños y niñas que hubieran adquirido la enfermedad en los meses que estuvieron en sus hogares, ya que desconocemos los efectos en su salud tanto en el sistema cardiovascular, pulmonar o renal, que puede haber generado el contagio con COVID-19. Estamos analizando todos los aspectos para un retorno seguro, porque sabemos los positivos efectos que tiene la práctica regular de ejercicio físico y, sobre todo, la importancia de la clase de educación física para el desarrollo biopsicosocial de los estudiantes”, relevó la académica.
En este nuevo escenario, los investigadores UPLA advierten que los establecimientos de educación deberán brindar las condiciones para aplicar medidas de higiene, reevaluar los espacios físicos y utilizar materiales, generar un protocolo específico para la clase de educación física y, en definitiva, dar seguridad a los estudiantes y sus familias.
Los doctores Reyes y Soto, que integran también el Laboratorio de Investigación en Actividad Física y Deporte (LIAFD) de la UPLA, trabajan colaborativamente con cinco estudiantes de Pedagogía en Educación Física y del Magíster en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte para contribuir con los escolares y docentes del país.